Muy pocos serán los espectadores privilegiados en la Bombonera. Achacollo ya tiene asegurado su cupo en el estadio Alberto J. Armando. Ayer, decenas de aficionados xeneizes se quedaron sin entradas debido a la modalidad de venta elegida por el club.
Leandro Fabián Achacollo tiene 24 años, es operario en una herrería argentina. Llegó a Buenos Aires hace dos décadas, por decisión de sus padres.
Foto:Jonathan Fernández
Es un argentino más, amante del fútbol y muy apasionado por su Boca Juniors. Es socio adherente desde hace tres años.
“Todo comenzó por mis amigos de la escuela, que me insistían en ser hincha de Boca (ríe). Antes simpatizaba por San José de Oruro por mi papá, pero cuando nos mudamos me enamoré de Boca y de esos años dorados cuando nos dirigía el Coco Basile y luego con la llegada de Miguel Ángel Russo y Riquelme”, cuenta.
La dirigencia de Boca puso ayer a la venta 29.000 boletos en el sector popular para socios del club en dos tandas: La primera, de 13.000, comenzó a las 9:00 y la segunda a las 18:00. El resto de las entradas populares fue reservado para peñas y agrupaciones del interior.
Por eso, para Achacollo fue una dura misión conseguir una entrada por cómo se dio el método de compra (NdeR: Reserva por internet por orden de llegada). “La verdad que sí, todavía no lo puedo creer. Escuché que había filtro, pero luego lo sacaron. Así que me metí a la página del club bien temprano y pude conseguir mi entrada. Mi hermanito no tuvo la misma suerte que yo. Somos muchos los hinchas que queremos estar y son pocos los lugares”, contó.
El orureño no se cambia por nadie. “Es un sueño hecho realidad. Todos los hinchas de Boca esperamos un partido como este: una final de Copa Libertadores y ante el rival de toda la vida. Estar en la Bombonera este sábado será cumplir un sueño que nunca se volverá a dar”.
Foto:Jonathan Fernández
Sólo los socios podían adquirir las entradas a través de internet en la página oficial para los socios del club.
“Es un inmenso orgullo para el pueblo boliviano y para mí, tener a Carlos Lampe en la final. Sé que se sacrificó mucho a lo largo de su carrera, y esto es un regalo por tanto esfuerzo. Me encantaría que atajase en la final, pero Rossi estuvo muy bien estos últimos partidos”, apuntó el boliviano que no se cansaba de mostrar su bandera de boca en las cercanías del estadio la Bombonera y que “si Boca da la vuelta olímpica en el gallinero (el Estadio Monumental), voy a caminando a Luján”.
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