Ante el pedido de Boca Juniors fundamentando que no había igualdad de condiciones, finalmente la Conmebol decidió postergar hasta nuevo aviso la final entre River y Boca. El martes, los presidentes de ambos clubes y la Conmebol se reunirán en Paraguay para definir cuándo se juega el trascendental encuentro que quedó marcado por hechos repudiables de parte de un grupo de inadaptados hinchas.
Lo confirmó. Alejandro Domínguez, presidente del organismo, confirmó que la segunda final de la Copa Libertadores se pospone porque "no están garantizadas las condiciones de igualdad entre ambos equipos".
El alto funcionario no dio una nueva fecha para el encuentro.
"No están dadas las condiciones y como estamos por el bien del fútbol vamos a convocar a los dos clubes a Asunción para buscar una nueva fecha", comentó.
Pide sanciones. El presidente de Boca Juniors, Daniel Angelici, anunció este domingo que presentó un pedido ante el Tribunal de Disciplina de la Conmebol para que sancione a River Plate por el ataque al autobús de sus jugadores en la llegada al Monumental para la frustrada final de la Libertadores.
"Esperamos que (el Tribunal) revise y se expida sobre el expediente de 15 fojas que presentamos con todos los informes médicos y policiales de lo que sucedió", indicó Angelici.
Boca va por los puntos. Domínguez había anunciado el sábado de noche un "pacto de caballeros" entre D'Onofrio, el dueño de casa, y Angelici, para la realización del partido el domingo, pero todo se torció esta madrugada cuando la dirigencia de Boca comenzó a contemplar la idea del reclamo acogiéndose al Artículo 18 del Reglamento Disciplinario. Entre los puntos más importantes de ese artículo figuran la "deducción de puntos", la "determinación del resultado de un partido", la "obligación de jugar un partido a puerta cerrada" y las "descalificación de competiciones en curso o exclusión de futuras competiciones".
No dan la cara. Hasta ahora, no ha habido declaraciones de parte de la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, o del mandatario Mauricio Macri, expresidente de Boca y actual mandatario de Argentina.
Se maneja la posibilidad de jugar la final en Abu Dabi
El Mundial de Clubes (que comienza el día 12 en los Emiratos Árabes Unidos) apremia a la hora de tomar la decisión, puesto que el campeón de la Libertadores participará en este torneo. Es por ello que, ante esta situación, varios medios de comunicación argentinos comenzaron a especular con la posibilidad de que la Conmebol se esté planteando que la final tenga lugar en Abu Dabi días antes del comienzo del Mundial de Clubes y que el campeón se quede en el país.
Con todos los supuestos, también podría darse el caso de que la decisión de la Conmebol ponga en vilo la representación sudamericana en el Mundial de Clubes de la FIFA.
El final de esta historia queda en suspenso y probablemente sea conocida en los días de esta semana.
Apuntes
Una Seguridad burlada. Más de 2.000 agentes desplegados en tres anillos de seguridad, un sistema aerostático de vigilancia y cámaras de detección facial no lograron impedir que un grupo de "barras bravas" atacara con piedras al autobús que llevaba a los jugadores de Boca al estadio Monumental.
Desde el 2013 se prohíbe el público visitante. Debido a la violencia en el fútbol, desde 2013 se prohibió la presencia de público visitante en los partidos, aunque eso no ha podido detener las muertes: cuatro en 2018 y 137 en los últimos 20 años, según la ONG Salvemos al Fútbol.
Los equipos con más hinchada. River y Boca son los clubes más populares del país y representan juntos a un 70% de los hinchas, en un país con 44 millones de habitantes donde el fútbol es una obsesión sin distinción de sexo o edades.
Boca ha hecho de esta Copa una obsesión, pues persigue el séptimo título para igualar al también argentino Independiente .
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