Un llamado entre Alejandro Domínguez y Florentino Pérez abrió la negociación de la Conmebol con la Real Federación Española de Fútbol. Horas después, el Santiago Bernabéu era anunciado como el estadio que albergaría la superfinal de la Copa Libertadores entre River y Boca, luego de que el partido de vuelta se suspendiera en el Monumental por la agresión al bus que trasladaba a los jugadores de Boca.
Sin embargo, Madrid no sólo recibirá a uno de los mejores clásicos del mundo del fútbol. La capital española deberá estar preparada también para un operativo de seguridad sin precedentes. Incluso la Policía nacional admitió que será el partido “de mayor riesgo de toda la historia de la ciudad”.
El domingo, el paseo de la Castellana, en pleno centro de Madrid, quedará cortado desde las nueve de la mañana. Ese lugar quedará dividido en dos zonas para hinchas de cada equipo.
El “fan zone” de River estará ubicado en la plaza de Cuzco, en el extremo norte, mientras que el de Boca estará al sur del Bernabéu, en un tramo que terminará junto al puente de la calle del Raimundo Fernández Villaverde, en la estación de metro Nuevos Ministerios.
Entre ambas habrá un área de seguridad de forma que no haya contacto entre ambas”.
A diferencia de lo que ocurre en Argentina, la apertura del estadio se hará apenas 90 minutos antes del comienzo del partido. Con esto, cuentan, “se quiere frenar cualquier inconveniente”.
De todas formas, mañana habrá una reunión clave. El delegado del Gobierno en Madrid, José Manuel Rodríguez Uribes, convocó para las 11 de la mañana (hora local) a todos los mandos policiales, en especial de la Comisaría General de Seguridad Ciudadana, en la que se concretará el despliegue final de agentes y dónde se ubicarán.
Aunque todavía no se ha dado cifras, se sabe que “superará con creces” a los efectivos destinados en otros partidos de alto riesgo, como un Real Madrid-Barcelona, en los que se llegan a movilizar hasta 2.500 agentes.
De hecho, la Policía nacional le pidió al director nacional de Seguridad de Fútbol de Argentina, Guillermo Madero, que se desplace a España “una delegación de especialistas en seguridad deportiva y del Sistema del Programa Tribuna Segura”, dada “la magnitud del evento a desarrollar y al control de los hinchas de ambos equipos”. “Todo ello con la finalidad de integrarse en el dispositivo de seguridad que la Policía nacional desarrollará”, añade el escrito.
BOCA JUNIORS FUE EL PRIMERO EN LLEGAR
El equipo de Boca Juniors se encuentra ya en Madrid, donde fue recibido entre aclamaciones por sus hinchas a la puerta del hotel en el que se alojará hasta el domingo, cuando jugará la gran final de la Copa Libertadores contra River Plate.
En la noche, River Plate aterrizó en el aeropuerto de Madrid, desde donde se dirigieron a su hotel, donde algunos aficionados se dieron cita para dar la bienvenida a su equipo.
CONMEBOL ADVIERTE A HINCHAS ARGENTINOS
La Conmebol recordó ayer a los espectadores que vayan a presenciar la final de la Copa Libertadores en el Bernabéu que la normativa española impide el ingreso y la permanencia a los estadios de fútbol a quienes realicen cánticos o porten pancartas que inciten a la violencia, entre otras medidas.
Los aficionados de River Plate y de Boca Juniors que hayan comprado sus entradas deberán acatar las reglas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario