El técnico del argentino River Plate, Marcelo Gallardo, pidió disculpas por haber ingresado al vestuario durante el partido que ganó el martes al brasileño Gremio, cuando se encontraba sancionado, y dijo que fue una reacción emocional e impulsiva, descartando una "postura desafiante".
"Haber ingresado al vestuario, haber trasgredido una norma reglamentaria, creo que tuvo mucho más que ver con lo emocional que con una actitud desafiante", aseveró Gallardo en una rueda de prensa este viernes, pocas horas antes de que el Tribunal de Disciplina de la Conmebol se pronuncie ante un reclamo presentado por Gremio.
Gallardo infringió una sanción que le impedía tomar contacto con sus jugadores en el partido de vuelta ante Gremio, en Porto Alegre por las semifinales de la Copa Libertadores de América, donde el equipo argentino logró el pase a la final al ganar 2-1.
La sanción había recaído sobre el DT de los 'millonarios' porque su equipo ingresó más tarde al campo de juego en el partido de ida en Buenos Aires tras el entretiempo.
"Fui sanguino, (pero) asumí mi responsabilidad, asumí que trasgredí la norma. Fue un acto impulsivo, íbamos perdiendo 2-0 (en el marcador global) en ese momento, sentí que tenía que estar con mi gente y eso hice", explicó Gallardo.
Gremio, aún campeón vigente de la Libertadores, reclama que el tribunal le otorgue el triunfo ante River por 3-0 y jugar la final con el argentino Boca Juniors, que el miércoles empató 2-2 con el brasileño Palmeiras al que había ganado en la ida por 2-0.
Más allá de la sanción que pueda aplicarle ahora la Conmebol, Gallardo se mostró exultante por "el privilegio" que será disputar la final de la Copa Libertadores 2018 con su archirrival Boca Juniors, una situación inédita.
River y Boca son los equipos más populares de Argentina y, de manera excepcional, el gobierno decidió permitir que asista público visitante a los partidos que se disputarán los próximos 10 y 24 de noviembre en Buenos Aires.
La prohibición de que los hinchas visitantes ingresen a los partidos en Argentina se tomó en 2013 por medidas de seguridad, luego de violentos incidentes en los estadios.
"Lo que vamos a vivir los argentinos en unas semanas es una final histórica. También una oportunidad de demostrar madurez y que estamos cambiando, que se puede jugar en paz. Le pedí a la Ministra de Seguridad que trabaje con (el gobierno de) la Ciudad para que el público visitante pueda ir", anunció el presidente Mauricio Macri este viernes en Twitter.
Al referirse a los temores de que pueda haber brotes de violencia en esa final, Gallardo sostuvo que "es un espectáculo deportivo y tenemos que vivirlo así. Debería ser normal. No tiene que ir más allá de eso, un partido de fútbol".
"Tenemos que pensar que es un espectáculo único, deportivo. El que gane tendrá la gloria deportiva absoluta y el que no (gane) se irá peleándola. No es de vida o muerte", remarcó.
Boca acumula hasta ahora seis Copas Libertadores y River tres.
No hay comentarios:
Publicar un comentario