Aunque todo hacía indicar que Boca iba camino a apelar a su mística copera, gracias a los regresos de Carlos Bianchi y Juan Román Riquelme, la historia en la presente edición de la Copa Libertadores no tuvo final feliz: quedó eliminado por penales en manos de Newell's (empataron 0-0 y perdieron por penales 10-9), por los cuartos de final del torneo. Por eso, casi colistas en el torneo Final, solo quedan dos objetivos: seguir vivos en la Copa Argentina y sumar la mayor cantidad de puntos en el certamen local.
El reto es para los dirigentes y cuerpo técnico, ya que varios futbolistas emigrarían a otros equipos.
Uno de los mejores jugadores del plantel, Agustín Orión, sería vendido al fútbol francés.
Otros que no tendrían futuro en Boca son los delanteros Santiago Silva, Lautaro Acosta y Juan Manuel Martínez. El "xeneize" deberá reforzarse
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